Había una vez un búho llamado Sabio, era muy viejo y un poco desagradable, mentiroso y grosero. Insultaba a los animales como al lobo Narneo, a la serpiente Fina y al Pájaro Carpintero.
Un día sabio paseaba por el bosque y, cuando se iba a sentar para comer, metió la pata y no la podía sacar. Entonces pidió ayuda a sus amigos que iban andando y dijo:
- ¡Ayudadme, ayudadme!
Y dijeron sus amigos:
- ¡Vale, te ayudaremos, pero con una condición.
- ¿Cual es la condición?- contestó el búho.
- Que nos dejes de insultar y que nos pidas perdón.
- ¡¡Vale, os dejaré de insultar y os pido perdón!!- dijo el búho
- Con eso nos vale ¡Vamos a ayudarle!
Y todos dijeron:
¡¡¡¡Siiiiiii!!!
F.